Hace varios meses que no he escrito ninguna entrada en el
post, debido en gran parte a la desesperación y frustración sufrida tras el
abandono de los entrenos. En otra por carecer de internet y tiempo por los
estudios o trabajo, en fin, excusas de bloguero…
Pues bien, parafraseando a mi madre “No hay mal que cien
años dure”, por tanto entre el abandono de la carrera a pie, un poco “bastante”
de bici y, sobredosis de paciencia, “parece” que ya hemos abandonado la lesión.
Digo parece porque aún entreno tres días a pie en semana combinando con la
bici, temiendo enlazar dos días de rodajes.
Resulta duro leer los post antiguos, pero sólo quien ha
sufrido una lesión tan grave como esta puede alcanzar a comprender la gran
frustración y desesperanza que se puede llegar a sentir.
Bueno, basta ya de autocompadecerse. El ahora es lo que
importa, he comenzado a recorrer el camino que si Dios quiere nos llevara a la
MARATON DE ROMA ( Si ya se el chiste fácil que todos los caminos llevan a
Roma). Como todo camino empieza por un paso, bueno más bien un gateo, porque
vamos, las primeras semanas tras la euforia de correr sin dolor, (Bueno más que
correr, reptar), han sido completamente ambivalentes. Por un lado emoción de
correr sin estar preguntando “el por qué” de las molestias, y por otro el
asombro por ver que mi cuerpo perdió todo esos ritmos del año pasado… jo,
¿Ha
pasado un año ya?
Desde aquí un saludo enorme a todos lo que me han leído y aquellos
que han soportado mi “mala leche” .
Enhorabuena por superar esa dura lesión y por tu retorno al blog! Ahora que has dado el primer paso toca continuar y contarnos al detalle tu preparación para Roma!
ResponderEliminarEnhorabuena por las buenas sensacioens. Tranquilo que el cuerpo tiene memoria, y ya verás que recuperarás los ritmos de antes rápidamente, eso si, con paciencia, que luego pasa lo que pasa.
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